MENSAJE EN UNA BOTELLA.
De la cocina salen muchas botellas de plástico: de refrescos, de agua, detergente, suavizante, limpiacristales… No los lleves al contenedor amarillo… ¡Tranquil@s!, no os vamos a pedir que no recicléis, al revés: os proponemos la mejor manera de hacerlo: jugando. Y construyendo. Y concienciando a los más pequeños de la importancia de dar usos alternativos a los objetos, y de que no hace falta gastar para tener un juguete original y divertido.
Aprovecha las vacaciones, el tiempo libre del que disponemos en verano para dejar volar la imaginación. Aquí os dejamos un montón de ideas, pero seguro que se os ocurren muchas más…
Un cohete a propulsión, no nos digáis que no es genial, y facilísimo: 2 botellas, fieltro (o la tela que queráis) y pintura:
Juegos de bolos para los más pequeños. Con los personajes que más os gusten: enanitos, luchadores de sumo…
Botellas de agua, de refrescos, incluso el suavizante de la ropa…ahora son caballitos para galopar…
Un asiento con tu animal favorito:
Simpáticas criaturas con diversas utilidades:
Máscaras… si eres un poco maños@, puedes hacer divertidísimas creaciones:
Coches, camiones, trenes, volquetes…
Huchas, las típicas de cerdito o las que se te ocurran:
Y para terminar, solo para profesionales o muy manitas, os dejamos estos robots hechos con piezas y tapones de plástico reciclados de botellas y otros recipientes, ¡ríete de los transformers!: